jueves, 24 de marzo de 2016

#40Años: El viento sigue soplando. Los orígenes de Madres de Plaza 25 de Mayo de Rosario

El libro de Marianela Scocco relata el surgimiento y consolidación de las Madres de Plaza 25 de Mayo de la ciudad de Rosario. Aspiramos a reconstruir cómo surge esta agrupación, primero desde sus acciones iniciales de denuncia en Familiares de Detenidos y Desaparecidos por Razones Políticas y Gremiales y luego con la conformación de la Delegación Rosario de Madres de Plaza de Mayo propiamente dicha, así como también de la filial de Abuelas de Plaza de Mayo, y qué relación tuvieron –en diferentes momentos– con las Madres de Plaza de Mayo de Buenos Aires y con otros organismos de derechos humanos
Prólogo
Por: Carlos del Frade
Cuarenta años después del golpe militar más sangriento de la historia argentina, esta tesis trabajada por la lúcida, sensible y militante Marianela Scocco tiene el mérito de escuchar, registrar y valorar la historia de las Madres de la Plaza 25 de Mayo de Rosario y, en forma paralela, mostrar que la vida es mucho más que especulación, individualismo, consumismo y dictadura del dinero.

Porque cuatro décadas después de la noche carnívora devenida en política de estado a partir del 24 de marzo de 1976, es necesario remarcar que más de mil decretos leyes de aquel terrorismo siguen vigentes en la Argentina de estos días.

Que el voto popular, por innumerables motivos, produjo la llegada al gobierno de gerentes de empresas nacionales vinculadas a los intereses extranjeros y también, directamente, funcionarios de multinacionales.

El sueño colectivo inconcluso de la Argentina que también este año cumple doscientos años, aquel surgido de la declaración de la independencia en Tucumán, debía basarse en la emancipación y la igualdad.

Los ideales de los 30 mil militantes revolucionarios desaparecidos, aquellos que eran mayoritariamente jóvenes y trabajadores. Aquellos que molestaban a los dueños de casi todas las cosas, los delincuentes de guante blanco del poder empresarial que se manifiesta detrás de las marcas que todavía siguen presentes, cuarenta años después.

La precisión y la contundencia de la investigación de Marianela deja espacio para la valoración del amor, la memoria, la dignidad y los valores colectivos; palabras y sustantivos que son despreciados por quienes entienden la vida como otro tiempo más de simple acumulación de riquezas.

Por eso el valor estratégico de esta obra que hoy comienza a intentar llegarle a la cabeza y el corazón de cualquier lector. Porque más que nunca, en esta Argentina manejada por un proyecto político y económico a imagen y semejanza de los proyectos del gran capital, es fundamental revivir los proyectos de los hijos de estas Madres que son ejemplo de lo humano por encima de la ferocidad del capitalismo.

Cuatro décadas después, el gobierno nacional repite las matrices represivas impuestas por Estados Unidos en países hermanos como Colombia, México y Brasil, bajo la excusa del combate contra el peligro colectivo del narcotráfico, la idea es invadir con fuerzas de seguridad nacionales los barrios empobrecidos de los conurbanos que a fines de los años sesenta florecían de trabajo y contagiaban la idea de la revolución, palabra que enamoró por méritos propios a los que entendían que la vida debe ser una fiesta para todos y no la propiedad privada de unos pocos. Esos enamorados eran, justamente, los hijos de estas Madres que Marianela Scocco presenta de una manera científica pero también conmovedora.

Este libro forma parte, si se quiere, de la necesaria apuesta por recuperar lo mejor del humanismo en la Argentina crepuscular de 2016.

He aquí el trabajo de una investigadora que sabe que la memoria no sirve para escudriñar el pasado sino para transformar el presente.

Por eso los invitamos, de todo corazón, a leer estas páginas.

Porque aquí están las historias de las Madres de la ciudad que alguna vez fuera el corazón del segundo cordón industrial más importante de América Latina y, por eso mismo, estas crónicas sirven para sentir y experimentar la convicción que la única forma de construir una realidad de justicia e igualdad es a través del protagonismo, de defender en serio lo que cada uno de nosotros dice amar.

Bienvenido, entonces, a este fenomenal trabajo de la investigadora Marianela Scocco.

Presentación

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